L-Acoustics DJ: El sonido inmersivo entra en la cabina
El estéreo ya no basta. L-Acoustics DJ llega para expandir la forma en que escuchamos, mezclamos y sentimos la música electrónica en directo.
En un panorama donde la tecnología suele ir por delante del club, L-Acoustics propone una herramienta que no complica, sino que libera. Su nuevo sistema, L-Acoustics DJ, convierte cualquier sesión convencional en una experiencia de audio inmersivo en 3D, sin alterar los flujos de trabajo ni pedirle al artista que reaprenda a pinchar.
Separación de stems en tiempo real
El corazón del sistema es un algoritmo propietario llamado Source Separate. Aísla en tiempo real los elementos principales de una pista estéreo —batería, bajo, voz y una cuarta categoría libre— y los redirige a un motor espacial que los posiciona físicamente en el recinto. No se trata de más volumen ni de más definición: se trata de movimiento, cuerpo y profundidad.
Desde el primer momento, el sistema fue diseñado para integrarse en cabinas analógicas o digitales, con la opción de ser controlado directamente por el DJ o en colaboración con un ingeniero de sonido espacial. La intención es clara: ofrecer nuevas posibilidades expresivas sin aumentar la complejidad técnica. Donde antes había dos canales planos, ahora hay un campo expandido donde el sonido ocupa espacio real.
Integración fluida y sin fricción
El sistema se apoya en el ecosistema de hardware y software ya conocido de L-Acoustics: el procesador L-ISA, el administrador de red LA, los altavoces profesionales y la app dedicada. Está pensado para integrarse directamente con el equipo de sonido existente de clubes y festivales, manteniendo el control en manos de los artistas.
Max Cooper fue uno de los primeros en probarlo durante la keynote de L-Acoustics 2025. Según él, "pude usarlo sin preparación especial. Lo conecté y ya tenía un lienzo mucho más amplio para mis sets de DJ y directos". Para artistas que llevan tiempo explorando el sonido inmersivo, L-Acoustics DJ representa una forma inmediata de ponerlo en práctica sin sacrificar espontaneidad.
Una experiencia para el club y el público
Para los recintos, la propuesta es igual de atractiva. Ofrece una manera de actualizar el sistema sonoro con capacidades inmersivas sin modificar la operativa diaria. Como explica Hugo Heathcote, consultor de L-Acoustics, "no hay que cambiar la forma en que el DJ actúa. Solo se amplía el lienzo sonoro sobre el que pinta".
The Other Side, en Ámsterdam, ya ha instalado esta tecnología. Allí, el sonido se desplaza con fluidez por todo el espacio, generando una conexión física y emocional más intensa con la música. La reacción del público confirma lo evidente: no se trata de una mejora técnica, sino de una transformación en la manera de vivir la música en directo.
