El gobierno derechista de Italia promulga una nueva ley "antirraves" tras clausurar una rave de Halloween
Los miembros de 16 sound systems luchan por recuperar sus equipos valorados en 150.000 euros e incautados por la policía
Celebrada durante el último fin de semana de octubre, la Witchtek 2K22 fue clausurada por la policía 24 horas antes de lo previsto, el lunes 31 de octubre.
Los miembros de 16 sound systems luchan por recuperar los equipos valorados en 150.000 euros, incautados por la policía, después de que ésta desalojase a 3.000 personas del almacén abandonado y detuvo a 14.
Bajo el mandato de Giorgia Meloni como primera ministra nombrada recientemente y su partido Fratelli D'Italia (Hermanos de Italia), de raíces neofascistas, el gobierno de Italia ha propuesto una ley a raíz de este hecho. Si es aprobada por el Parlamento en su forma actual, la ley prohibirá las reuniones u eventos no autorizadas de más de 50 personas. Los promotores de eventos podrían ser multados con entre 1.000 y 10.000 euros, y enfrentarse a entre tres y seis años de cárcel.
En la actualidad, los eventos musicales sin licencia son técnicamente ilegales en Italia, pero no están penalizados; la introducción de nuevas medidas supondría encarcelar a los organizadores por primera vez en el país.
El evento sin licencia supuestamente afectó al tráfico en la zona de Módena y provocó varias quejas por ruido. Sin embargo, los testigos informan de que la multitud se marchó sin problemas cuando se les pidió, y que, además, se fueron sin dejar rastro.
Según los testimonios recogidos por Resident Advisor, asistentes a la rave perciben que la nueva ley se utiliza como pretexto para prohibir cualquier forma de protesta, manifestación u ocupación, criminalizando las fiestas y convirtiéndolas en motivo de represión.
"¡Se acabó la fiesta!", dijo el ministro de ultraderecha Matteo Salvini, que se ha mostrado especialmente crítico en las redes sociales con las raves ilegales desde el suceso de Módena. "Feliz Halloween a todos, menos a los de media Europa que vinieron a causar el caos en Módena, en Italia, con una fiesta rave ilegal", dijo en Twitter.
Más allá de la ley antiraves, las nueva políticas preocupan a la escena electrónica europea, ya que el pasado viernes 29 de octubre, mientras que la policía llegaba a la rave se celebraba en la ciudad de Predappio una concentración con 2.000 fascistas conmemorando los 100 años de la marcha de Mussolini de Milán a Roma, haciendo saludos fascistas con el brazo rígido.
Tal y como informa Resident Advisor, el antifascismo es un principio fundamental de la Constitución italiana. Además de prohibir el resurgimiento del disuelto partido fascista italiano, la ley prohíbe las manifestaciones públicas de fascismo. Sin embargo, el gobierno de Meloni es el primero con raíces neofascistas desde el derrocamiento de Mussolini en 1943.
Según The Guardian, el político italiano de centro-izquierda Andrea Orland dijo que la "rave" fascista de Predappio era "mucho más perturbadora" y debería haber estado en el radar del gobierno en lugar de la fiesta de Halloween.